La constancia, tenacidad, paciencia, compromiso, entre otras son grandes virtudes. Sin embargo, también está en nosotros la desidia, pasividad, ansiedad y otras debilidades, que en opinión de algunos serían más bien defectos. Lo que está claro, es que tenemos de ambas. Si queremos aminorar nuestras debilidades ¿nos estaríamos convirtiendo en personas egocéntricas? Y si pensamos en fortalecer nuestras virtudes para…
