La respuesta completa a esta interrogante es de largo desarrollo. Sin embargo, de forma sucinta podemos decir que la gran mayoría de los maestros antiguos practicaban y eran sensei tanto de Karate-do como de Kobu-do y enseñaban en sus Dojo ambas disciplinas.
Como consecuencia de ello, en Yuetsu Chile creemos que todo practicante de alguna disciplina de manos vacías, como el Karate-do, no puede sentirse verdaderamente realizado en su arte, hasta que no haya adquirido habilidad en al menos un arma no arrojadiza. Puesto que al entrenar con armas: en el combate se logra perfeccionar el estado de permanente alerta y concentración; se trabaja la aceptación y preparación ante la batalla; asimismo cambia la percepción del espacio/tiempo; además de mejorar la velocidad y obviamente la fuerza; entre otras tantas cosas.
Los invitamos a que descubran en Yuetsu las bondades de Matayoshi Kobudo.